viernes, 12 de marzo de 2021

Cáñamo industrial y medicinal

El trafico ilegal de cannabis en la península procedente de Marruecos, está apunto de finalizarse. Marruecos ha aprobado el jueves 11 de marzo la ley que despenalizará y legalizará el cultivo del cannabis para usos medicinales e industriales.

 
En el proyecto del ley se contempla la creación de una Agencia Nacional que monopolizará la comercialización del cánnabis y controlará todas las fases de cultivo y producción, mientras que los campesinos con permiso para cultivarlo deberán organizarse en cooperativas.
Con la aprobación de esta ley, Marruecos se convertirá en uno de los primeros países del entorno mediterráneo en legalizar el cannabis para usos médicos e industriales.
Todo lo cual viene promovido porque el pasado miércoles 2 de diciembre de 2020, la mayoría simple de los 53 Estados de la Comisión de Estupefacientes de la ONU, siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud sobre los beneficios médicos y terapéuticos, decidio retirar el cannabis y su resina de la Lista IV de la Convención sobre drogas de 1961, lo que significa que se reconoce oficialmente la utilidad médica de esa planta, cuyo consumo recreativo seguirá prohibido en la normativa internacional.
Todo lo cual está motivando una cascada de reacciones en los distintos países con tradición agrícola relacionada con el cultivo del cáñamo, o "cannabis industrial." tendentes a legalizar ciertos usos médicos, industriales y de investigación " de la planta, según distintos proyectos de ley, entre ellos Marruecos y Argentina que legalizarán el cultivo, la exportación y la venta nacional de cannabis para uso medicinal e industrial.
Así mismo, los mayores productores de América, como México y Paraguay, están percibiendo lo que esto puede suponer, una oportunidad gigante para impulsar cambios a nivel jurídico, científico e industrial."
Se calcula que, en 2025, la poderosa industria mundial del cannabis medicinal e industrial moverá unos 50.000 millones de euros, de los cuales una décima parte, 5.000 millones, serán en España.
Por un lado, España ha sido históricamente un gran productor de cáñamo rico en CBD, de la misma familia que el cannabis, pero sin THC, que es el compuesto psicoactivo, todo esto se terminó cuando USA y la ONU aplicaron criterios restrictivos generalizados sobre el concepto de "lucha contra la droga".
España debería ir espabilando e ir preparando su legislación para generalizar sus usos industriales y medicinales antes que las grandes farmacéuticas y multinacionales mundiales monopolicen el sector.
Los rendimientos medios en nuestro país indican que de una hectárea cultivada de cáñamo se pueden obtener 250 litros de aceite, 750 kg de tortas de semilla y 3 toneladas de fibra.
Su variedad de usos es sorprendente:
Productos Médicos y de Parafarmacia.
Productos Textiles de Cáñamo.
Alimentación de Cáñamo.
Cosmética de Cáñamo.
Papel de Cáñamo.
Componentes para la Construcción de Casas.
Materiales para la Industria (Pastillas de Frenos y otras partes de los coches, incluido Combustible de Cáñamo).
Aceites Industriales de Cáñamo.
Fuente siempre renovable de energía.
Por otro lado ¿Quién se está apoderando de la industria del cannabis medicinal en España?
Una vez más la miopía de nuestros dirigentes políticos nos va a dejar fuera del mercado del Cannabis industrial y medicinal como ya sucedió en décadas anteriores con la producción solar.
España y Portugal, son países con unas posibilidades enormes para el cultivo de cannabis medicinal por su climatología tan favorable, por la tradicional implantación que tiene el sector del cáñamo y por los grandes profesionales que hay. España, en concreto, es un país puntero con mucha diferencia sobre el resto.
Pero igual que ocurrió, con la energía solar, en vez de ser la referencia mundial estamos otra ven en el furgón de cola viendo cómo otros países que no nos deberían hacer competencia nos están pasando por ejemplo Marruecos, porque nuestros gobernantes no son valientes y nuestros políticos no están comprometidos en serio en el desarrollo agrícola de la España rural y vaciada.
Leyes como esta son las que realmente sirven para poner fin al comercio ilegal de cannabis para uso recreativo en el mundo. Acabando con las mafias y con lo la corrupción que ellas representan.