El Sonido de la Plaza

España está mucho mas madura de los que parece para un cambio sociopolítico de gran envergadura.En gran parte eso se debe a que somos el país donde más creció la exclusión social y el desempleo . En la construcción, en la industria manufacturera, en el sector servicios(comercio y hostelería) y en los trabajos agrarios, actividades que generalmente emplean mano de obra de edad intermedia y de casi nula especialización laboral , de entre 35 y 50 años. El sostén económico de la familia, ya sea hombre o mujer, ellas principalmente en el sector doméstico, sin olvidarnos de los jóvenes que aunque con menos cargas familiares han visto truncarse sus posibilidades de futuro ante esta crisis de duración incierta.
El número de mileurista ha aumentado espectacularmente se cree que podría rozar en más los 13 millones de trabajadores (sobre todo entre la juventud). Es el paso inmediato a la exclusión social del grupo anterior. Las cifras oficiales no son nada alentadoras, unos 19,3 millones de asalariados ganan menos de 1.100 € al mes, serían los menos-mileuristas. Entre los trabajadores por cuenta propia el porcentaje roza el 75%.
La proporción más alta de "mileuristas está en Extremadura. Hay 8,57 millones, de los que 7,27 millones (el 84%) viven con menos de 1.000 euros al mes.
 Actualmente hay casi cinco millones de parados , de los que 1,8 millones reciben una prestación inferior a 1.000 euros. A todo ello le sumamos cerca de un millón de desempleados que no percibirían ninguna renta pública. Mas un millón de ilegales que no perciben nada de nada. Si somos 44 millones los habitantes de España.La conclusión es espeluznante 7 de cada 10 sobreviven con menos de 1.100 euros al mes. Y hasta ahora nadie hablaba, sobre todo desde los gobiernos, de cambios estructurales solo de aumentar subsidios o de eliminar impuestos. Soluciones parche para seguir perpetuando la injusticia social y aumentar la brecha que separa cada día mas los mundos divergentes de riqueza y pobreza. El mundo que quieren que demos en herencia a nuestros hijos.